Día 8
Él es nuestra liberación
Bienvenido al día 8 de 21 dias de ayuno
12 de Febrero de 2024
Dios es fiel, y Su protección es nuestra fuerza.
ESCRITURA DE HOY
“Por último, hermanos, oren por nosotros para que el mensaje del Señor se difunda rápidamente y se le reciba con honor, tal como sucedió entre ustedes. Oren además para que seamos librados de personas perversas y malvadas, porque no todos tienen fe. Pero el Señor es fiel, y él los fortalecerá y los protegerá del maligno. Confiamos en el Señor en que ustedes cumplen y seguirán cumpliendo lo que hemos ordenado. Que el Señor lleve sus corazones a amar como Dios ama y a perseverar como Cristo perseveró”.
—2 Tesalonicenses 3:1-5 (NVI)
Escritura Adicional
Efesios 6:12 (NBLA)
REFLEXIONE EN LA PALABRA
Es trabajo de Dios liberarnos. Nuestro trabajo es orar y pedirlo. Y aunque Pablo pide ser liberado de los malvados, dice que el Señor nos protegerá del maligno. Este es un recordatorio de que nuestra protección no es contra sangre y carne — ni siquiera contra la sangre y carne de la gente malvada — sino contra los principados y potestades que actúan dentro de ellos (Ef. 6:12). Y Dios nos protegerá. Pero primero nos fortalecerá. Así que, cuando la liberación parezca demorarse, confíe en que la presión le está dirigiendo hacia el amor de Dios y formando la perseverancia de Jesús en usted.
ORACIÓN + CONTEMPLACIÓN
1. ¿Dónde está tomando la liberación y la protección en sus propias manos en lugar de confiar en que Dios lo hará en Su tiempo? Confiese y póngalo en manos de Dios.
2. ¿Hay personas sobre las cuales Dios necesita recordarle que su batalla no es contra ellas? Ore para verlos como Dios los ve, y ore también por su liberación y protección.
3. Ore que pueda confiar en Dios como su libertador, incluso en medio de pruebas y
tribulaciones dolorosas.
MOMENTO EN FAMILIA:
EL PODER DE LA ORACIÓN
Lean 2 Tesalonicenses 3:1-5. ¡La oración es poderosa! En la carta de Pablo a los Tesalonicenses, él les pide que oren. La oración es nuestra mejor arma contra el enemigo. Nosotros también tenemos la tarea de orar para que Dios nos proteja con Su poder. Escriban “Dios es nuestro protector” en una hoja de papel.
Alrededor de esa verdad, escriban nombres de personas que conocen que necesitan la protección de Dios. Tal vez sean miembros del personal de su iglesia, gente de la escuela, familiares o vecinos. Oren por turnos por las personas en su nuevo “tablero de oración”. Si les resulta útil, utilicen la siguiente oración para cada nombre: “Señor, por favor sé fiel para fortalecer y proteger a [nombre], del maligno”.
